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PUEBLOS INDÍGENAS
En la COP16, la FUNAI destaca la importancia de los pueblos indígenas en la protección de la biodiversidad
Joenia Wapichana subrayó que ha llegado el momento de que los "no indígenas" también se esfuercen por comprender a los pueblos indígenas, que con frecuencia se comunican en sus lenguas maternas, y no solo en portugués - Foto: Lohana Chaves/Funai
La diversidad lingüística y cultural de los pueblos indígenas en Brasil y la importancia de las nuevas formas de comunicación para sensibilizar a la sociedad, así como la relación histórica de los pueblos indígenas con sus territorios, a través de prácticas sostenibles que contribuyan al equilibrio ecológico, fueron resaltadas por la presidenta de la Fundación Nacional de los Pueblos Indígenas (FUNAI), Joenia Wapichana, el martes, 22 de octubre, durante su participación en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Biodiversidad - COP16, que tiene lugar en Cali, Colombia.
Los pueblos indígenas de la Amazonia desempeñan un papel fundamental en la conservación de la biodiversidad, aplicando técnicas como la agricultura de bajo impacto, el extractivismo y el uso medicinal de las plantas. Estos conocimientos se transmiten de generación en generación y son esenciales para la conservación de bosques y ecosistemas enteros”.
Joenia Wapichana
Presidenta de la FUNAI
Estos y otros puntos fueron destacados por Wapichana en el panel "Voces de la Amazonia: Perspectivas indígenas sobre la conservación de la biodiversidad y la resiliencia ante el cambio climático", promovido por la Agencia Alemana de Cooperación Internacional (GIZ) y la Organización del Tratado de Cooperación Amazónica (OTCA).
“Los pueblos indígenas de la Amazonia desempeñan un papel fundamental en la conservación de la biodiversidad, aplicando técnicas como la agricultura de bajo impacto, el extractivismo y el uso medicinal de las plantas. Estos conocimientos se transmiten de generación en generación y son esenciales para la conservación de bosques y ecosistemas enteros”, explicó la presidenta de la FUNAI, Joenia Wapichana.
Durante el panel, se proyectó la película brasileña Território Pequi para ilustrar claramente esta conexión. El documental fue producido por los pueblos Kuikuro del Alto Xingu, y retrata la relación entre los pueblos indígenas y el árbol de Pequi o nuez souari (Caryocar brasiliense), símbolo de un vasto patrimonio cultural y genético, esencial para los sistemas agrícolas sostenibles de la Amazonia.
FUNAI — La FUNAI ha desempeñado un papel clave en la defensa de los derechos de los pueblos indígenas y la protección de sus territorios. La institución cuenta con el apoyo de colaboradores internacionales, como la GIZ, para promover mecanismos de financiamiento climático que sean culturalmente adecuados, garantizando que las comunidades y los pueblos indígenas tengan una participación activa en las políticas de mitigación y adaptación al cambio climático.
EQUILIBRIO CLIMÁTICO — El lunes, 21 de octubre, durante el panel “Importancia de las Tierras Indígenas para la Conservación de la Biodiversidad y el Equilibrio Climático”, promovido por la FUNAI, el órgano enumeró una serie de factores que motivan la necesidad de protección ambiental de las tierras indígenas y, sobre todo, de aquellas que protegen la biodiversidad.
Según el órgano indigenista, la protección debe entenderse en el sentido más amplio posible, tanto de la biodiversidad como de la garantía de las condiciones de bienestar y seguridad de los propios pueblos indígenas.
Joenia Wapichana subrayó que es necesario incluir la protección de quienes protegen la biodiversidad. "Cuando hay propuestas para hacer frente a la crisis climática a la que se enfrenta el mundo, siempre es importante establecer conexiones con otros desafíos, como garantizar los derechos sociales de los pueblos indígenas", resaltó.
"Las tierras indígenas no están vacías, tienen seres humanos, personas que sienten frío, sienten calor, sienten hambre, tienen necesidades, sienten inseguridad por la amenaza a sus territorios, sufren enfermedades que se propagan por la contaminación causada por las invasiones", enfatizó la presidenta de la FUNAI.
Entre los factores que mencionó como motivadores de la necesidad de protección ambiental de las tierras indígenas están las tasas más bajas de deforestación en comparación con otras unidades de conservación; la efectividad de la política de protección territorial de la FUNAI, con monitoreo y vigilancia de las tierras indígenas; y la plena posesión de dichas tierras contribuye al control climático global y a un medio ambiente ecológicamente equilibrado.
ACCIONES — Wapichana también puso de relieve el trabajo desarrollado por la FUNAI desde 2023 para proteger a los pueblos indígenas, especialmente en la reanudación de los procedimientos de demarcación que llevaban seis años paralizados. Desde el año pasado, se han creado ocho Grupos de Trabajo (GT) para estudiar la identificación y delimitación de las tierras indígenas. Actualmente hay más de 30 grupos en curso y 150 tierras indígenas en fase de estudios de campo.
A través del trabajo colectivo y coordinado del Gobierno federal, siete tierras indígenas han alcanzado la etapa de "desintrusão", que consiste en la retirada de la población no indígena de las tierras tradicionalmente ocupadas. El Gobierno federal ya ha homologado 10 tierras indígenas y emitido cuatro ordenanzas declaratorias que reconocen que estas tierras son de usufructo exclusivo de los pueblos indígenas.
"Tuvimos un momento triste en nuestra historia cuando los procesos de demarcación estuvieron paralizados durante muchos años. La FUNAI es un órgano indigenista federal que es el principal ejecutor de la política indigenista, es decir, no hay otro órgano en Brasil que demarque las tierras indígenas. Por eso, cuando se detiene su trabajo, cuando no se dan a la FUNAI las condiciones para moverse o cuando surge una ley que frena la demarcación de las tierras indígenas", afirmó.
COP16 — La Conferencia de las Partes del Convenio sobre la Diversidad Biológica (COP) es el principal foro global donde los países se reúnen para debatir y negociar acciones para la conservación de la biodiversidad. Como tratado internacional, adoptado en la Cumbre de la Tierra, que tuvo lugar en Río de Janeiro en 1992, su objetivo es establecer agendas, compromisos y marcos de acción para conservar la diversidad biológica y su uso sostenible, así como garantizar el reparto justo y equitativo de los beneficios derivados del uso de los recursos genéticos.
La biodiversidad abarca la variedad de especies, ecosistemas y recursos genéticos que sustentan la vida en la Tierra, y su preservación es esencial para mantener el equilibrio ecológico, garantizar la seguridad alimentaria, luchar contra el cambio climático y promover el desarrollo sostenible.