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Brasil comparte con Francia la coordinación de la reunión del Foro de París con acreedores
Tatiana Rosito, al lado de Bertrand Dumont.
La 11ª Reunión del Foro de París tuvo lugar el pasado 26 de junio en la capital francesa. La reunión se organiza anualmente por el Club de París, una red informal de países acreedores, y en esta edición la coordinación fue compartida entre Francia y Brasil, en calidad de país responsable de la presidencia del G20.
Brasil estuvo representado por la embajadora Tatiana Rosito, secretaria de Asuntos Internacionales de Hacienda y coordinadora del Canal de Finanzas del G20, quien estuvo al lado del director general del Tesoro francés, Bertrand Dumont. La reunión promovió debates centrados en el "Common Framework" (marco común), una iniciativa establecida por el G20 en 2020 para abordar la deuda de los países de renta baja. Además de los acreedores tradicionales representados en el Club de París, esta iniciativa cuenta con la participación de otros acreedores importantes miembros del grupo, como China, India y Arabia Saudita.
"Como sabemos, la perspectiva actual en cuanto a riesgos y vulnerabilidades de la deuda soberana es muy desafiante, ya que los elevados niveles de endeudamiento y los costos del servicio de la deuda plantean desafíos significativos para la estabilidad económica y el desarrollo. Los países de renta baja son los más afectados. La deuda externa de los países en desarrollo ha aumentado un 60% en la última década", dijo Rosito a los participantes.
La embajadora subrayó que el problema de las deudas soberanas debe analizarse y abordarse teniendo en cuenta múltiples factores, muchos de los cuales están relacionados con la agenda de debates de Brasil para el G20, pero que pueden y deben tomarse medidas específicas.
"El diálogo que estamos manteniendo acerca de la deuda durante la presidencia del G20 y en otros diversos foros confirma la opinión consensuada de que los problemas de la deuda no deben considerarse de forma aislada", afirma. Para la coordinadora, las soluciones a los desafíos de la deuda deben implicar un enfoque multifacético y holístico, que incluya la arquitectura financiera internacional y el patrón de los flujos de capital, así como los Bancos Multilaterales de Desarrollo (BMD), la reforma de la gobernanza global, las reformas del crecimiento, la movilización de los recursos nacionales y la mejora de los mecanismos de reestructuración de la deuda. "A pesar de ello, está claro que un factor apremiante a corto plazo es el aumento de los costos del servicio de la deuda. Esto también suscita el debate de cómo proporcionar liquidez a corto plazo para evitar contratiempos en el desarrollo", añade.
Los paneles contaron con la participación de ministros de finanzas, de representantes de organizaciones internacionales, de instituciones financieras privadas, de organizaciones no gubernamentales y del mundo académico. Entre las delegaciones representadas a alto nivel se encontraban Argentina, China, Ghana, Camerún, así como organizaciones como el FMI y el Banco Mundial y numerosos representantes de organizaciones de la sociedad civil.
Brasil concede gran importancia a la cuestión de la deuda en el Grupo de Trabajo sobre Arquitectura Financiera Internacional del Canal de Finanzas del G20 (GT-AFI), con especial énfasis en las iniciativas que amplifiquen la voz de los países deudores, especialmente los africanos. La presidencia brasileña del G20 celebró, en febrero, una reunión de alto nivel con las Naciones Unidas y los miembros africanos del G20, y organizó, en junio, un debate dirigido por representantes oficiales y de organizaciones de la sociedad civil africana en la tercera reunión del GT-AFI, en Fortaleza.
El Club de París se creó en 1956. Es un grupo informal de acreedores oficiales cuyo papel consiste en encontrar soluciones coordinadas y sostenibles a las dificultades de pago que experimentan los países prestatarios. Brasil es miembro del grupo desde 2016, representado por el Ministerio de Hacienda.
Los 22 miembros del Club de París son: Australia, Austria, Bélgica, Brasil, Canadá, Dinamarca, Finlandia, Francia, Alemania, Irlanda, Israel, Italia, Japón, Corea del Sur, los Países Bajos, Noruega, la Federación Rusa, España, Suecia, Suiza, el Reino Unido y los Estados Unidos de América. Sudáfrica es miembro prospectivo desde 2022.