Las acciones del Gobierno federal en el Territorio Yanomami consolidan la retirada de invasores y la asistencia a los indígenas

La actuación de los órganos federales en el Territorio Indígena Yanomami, bajo la coordinación de la Casa de Gobierno, avanza en diferentes frentes de trabajo: el apoyo a la población indígena y la búsqueda de la retirada total de los garimpeiros ilegales. En una operación conjunta del Ejército, el IBAMA y la Fuerza Nacional, se destruyó el martes, 25 de junio, un campamento que utilizaban los garimpeiros ilegales en la región de Xitei. La estructura contaba con una cocina equipada con tres congeladores, un sistema de Internet por satélite Starlink, una balanza de gran tamaño que se usaba para pesar los materiales extraídos ilegalmente y radios de comunicación que se utilizaban para coordinar las actividades ilícitas.

La acción también dio como resultado la destrucción de 3 mil kilos de casiterita, un mineral muy explotado en la región, y la incautación de 2.300 litros de combustible, que se utilizaba para alimentar los equipos mineros. Además, se desactivó una pista de aterrizaje clandestina para impedir el transporte de materiales y garimpeiros ilegales a la zona.

"La destrucción del campamento y la incautación de equipos son pasos importantes hacia el desmantelamiento de las redes de minería ilegal", declaró uno de los oficiales a cargo de la operación. "Nos comprometemos a garantizar la integridad de estas tierras y la seguridad de las poblaciones indígenas que dependen de ellas".

La lucha contra la minería ilegal en Territorio Indígena Yanomami forma parte de un esfuerzo continuo del Gobierno federal para proteger a las poblaciones indígenas y preservar el medio ambiente. Las operaciones de seguridad tienen como objetivo desmantelar las estructuras operativas de la minería ilegal que han causado grandes daños a la selva y amenazado la vida y la salud de los Yanomami. La presencia conjunta de los entes federales refleja la importancia y la urgencia de esta iniciativa.

Distribución de alimentos

Al mismo tiempo que se llevan a cabo las operaciones de seguridad, el Gobierno federal sigue entregando cestas de alimentos a las comunidades que aún se enfrentan a dificultades para alcanzar la autonomía alimentaria, debido a la destrucción causada por la minería ilegal.

Desde que se inició esta operación de entrega de alimentos por parte del Ministerio de Pueblos Indígenas (MPI), en abril, se han repartido un total de 8.763 cestas de alimentos, que han beneficiado a cientos de familias. Desde el inicio de 2023 se han entregado 78.000 cestas de alimentos a los indígenas.

La distribución de las cestas se realiza a través de centros regionales como Surucucu y Auris, con entregas adicionales de emergencia a la comunidad de Missão Katramani. Recientemente, también se ha atendido a la zona de Palimiu, gracias a los esfuerzos destinados a la retirada y la lucha contra la minería ilegal.

La distribución de las cestas se realiza a través de centros regionales.

"La situación es crítica, y estas cestas de alimentos son un salvavidas para muchas familias", declaró Paulo Oliveira, director de protección territorial del Ministerio de Pueblos Indígenas (MPI) y responsable de la operación. "Estamos trabajando incansablemente para garantizar que cada comunidad reciba el apoyo necesario".

Cada cesta de alimentos se ha preparado cuidadosamente para incluir alimentos acordes con la dieta tradicional Yanomami, contribuyendo así a la salud y el bienestar de las comunidades. Los artículos incluyen harina de mandioca, arroz, sal y proteína animal, como pescado enlatado. Las cestas se entregan por vía aérea, lo que supone un importante esfuerzo logístico, reflejado en el importe total comprometido en el contrato de horas de vuelo, que alcanza los BRL 185 millones.

"A través de la retirada y la lucha contra la minería ilegal, hemos podido ampliar nuestra área de actuación y llegar a comunidades que antes estaban aisladas", añadió Paulo. " Este es un paso importante para restaurar la dignidad y la seguridad alimentaria de los Yanomami".

Nilton Tubino, director responsable de la Casa de Gobierno, subrayó el compromiso de la administración federal de proteger y apoyar a las comunidades indígenas que han sufrido por la explotación ilegal de sus territorios. "Estamos decididos a proporcionar no solo asistencia inmediata, sino también a garantizar la seguridad y la sostenibilidad a largo plazo de estas comunidades", señaló.

La acción de emergencia está siendo ampliamente reconocida como un modelo de intervención humanitaria eficaz, que demuestra cómo el apoyo gubernamental y una logística bien coordinada pueden hacer una diferencia en situaciones de crisis. Sin embargo, siguen existiendo desafíos, y la lucha contra la minería ilegal sigue siendo una prioridad para garantizar la preservación del territorio y la cultura Yanomami. El objetivo del Gobierno federal es desarticular las actividades ilegales y enviar un mensaje claro de su compromiso con la protección de los recursos naturales y las comunidades indígenas de Brasil.