Lula se reúne con ministros para abordar la acogida de brasileños repatriados desde EE. UU.

El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, se reunió este martes 28 de enero con varios ministros para tratar la acogida de los brasileños repatriados desde Estados Unidos debido a las medidas antiinmigración. Entre los principales objetivos del Gobierno federal destacan garantizar el respeto de los derechos humanos en el proceso de deportación y facilitar la reinserción de los ciudadanos en Brasil.

Toda a nossa expectativa é que possamos trabalhar para garantir que famílias não venham separadas e que esses passageiros tenham boas condições de água, alimentação, inclusive de temperatura, que me parece que foi a coisa mais prejudicial no processo desse voo”

Macaé Evaristo, ministra dos Direitos Humanos e da Cidadania

El ministro de Relaciones Exteriores, Mauro Vieira, detalló que durante la reunión se le informó al presidente Lula sobre el vuelo en el que 88 brasileños fueron repatriados la semana pasada desde EE. UU. "El objetivo de la reunión no solo era informar al presidente sobre lo ocurrido, sino también definir cómo abordar este asunto en el futuro y dialogar con las autoridades estadounidenses para que, en caso de nuevas deportaciones, estas se realicen cumpliendo los requisitos mínimos de dignidad, respeto a los derechos humanos y atención adecuada para los pasajeros en un viaje de esta duración", explicó Vieira.

El sábado 25 de enero por la noche aterrizó en el aeropuerto internacional de Confins, en Belo Horizonte, Minas Gerais, un avión KC-30 de la Fuerza Aérea Brasileña (FAB) que transportaba a los brasileños repatriados. La previsión inicial era que llegaran a la capital de Minas Gerais la noche del viernes 24, pero el avión procedente de EE. UU. tuvo un problema técnico y tuvo que aterrizar en Manaos (estado de Amazonas).

Transportar a los brasileños de Manaos a Belo Horizonte fue una decisión del presidente Lula para garantizar que completaran su viaje con dignidad y seguridad. Los brasileños que llegaron esposados a la capital amazónica fueron recibidos e inmediatamente liberados de las esposas por la Policía Federal, siguiendo las indicaciones del ministro de Justicia y Seguridad Pública, Ricardo Lewandowski, para garantizar la soberanía brasileña en territorio nacional y los protocolos de seguridad en nuestro país. La Policía Federal prohibió que las autoridades estadounidenses volviesen a detenerlos.

PUESTO DE ACOGIDA — La ministra de Derechos Humanos y Ciudadanía, Macaé Evaristo, quien recibió a los deportados en Minas Gerais, anunció el martes que el presidente Lula autorizó al Ministerio a iniciar las gestiones para establecer un puesto de acogida humanitario en Confins. La medida responde a la posibilidad de que se produzcan más deportaciones desde EE. UU. "Lo que esperamos es poder trabajar para garantizar que las familias no sean separadas y que estos pasajeros tengan acceso a condiciones óptimas de agua, alimentación e incluso temperatura adecuada, que creo que fue lo más perjudicial durante este vuelo", dijo.

Otra de las prioridades del Gobierno es facilitar la reinserción laboral de los repatriados. "Ya hemos recibido señales de algunas empresas interesadas en hablar con nosotros para poder pensar también en mecanismos de inclusión productiva en el mundo laboral para estas personas. También es muy importante que contemos con el apoyo de los gobiernos de los estados y de las secretarías municipales. Por eso queremos establecer este diálogo", declaró. "Estos son nuestros ciudadanos que regresan a casa y creo que tenemos que darles la mejor acogida posible", enfatizó Macaé Evaristo.

DIÁLOGO — A la reunión presidencial asistieron el vicepresidente, Geraldo Alckmin; los ministros Ricardo Lewandowski (Justicia y Seguridad Pública), José Múcio (Defensa) y Sidônio Palmeira (Secretaría de Comunicación Social); la secretaria ejecutiva de la Casa Civil, Miriam Belchior; el comandante de la Aeronáutica, teniente brigadier del aire Marcelo Damasceno; el director general de la Policía Federal, Andrei Rodrigues; y Celso Amorim, asesor jefe de la Asesoría Especial del presidente de la República.