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RELACIONES EXTERIORES
Brasil firma acuerdos del orden de R$ 62,5 mil millones con China y EAU y Lula resalta el protagonismo internacional del país
El gobernador Jerónimo Rodrigues (BA) firmó un memorando de entendimiento para la producción de combustibles renovables - Foto: Ricardo Stuckert (PR)
En un balance sobre los cuatro días de viaje a China y a los Emiratos Árabes Unidos, el presidente de la República, Luiz Inácio Lula da Silva, destacó el regreso del protagonismo internacional de Brasil y mencionó acuerdos del orden de R$ 62,5 mil millones firmados con los dos países – R$ 50 mil millones con los chinos y R$ 12,5 mil millones con el país árabe. Sin embargo, Lula resaltó que, más que los recursos financieros, lo importante es la posibilidad de nuevos entendimientos en diferentes áreas, como la cultural, la digital y la educativa.
"Vuelvo a Brasil con la convicción de que estamos regresando a la civilización. El gobierno está haciendo aquello que es su obligación: abrirse para el mundo y, al mismo tiempo, convencer al mundo a abrirse para Brasil", expresó el presidente, en una conversación con periodistas, contando también que invitó a los dirigentes de los dos países a visitar Brasil. Según él, con muchos intereses económicos en el país, el Jeque Mohammed bin Zayed Al Nahyan aceptó la invitación, y el presidente chino, Xi Jinping, también señalizó amplias posibilidades de venir a Brasil.
En la entrevista en Abu Dhabi, antes de embarcar de regreso a Brasilia (DF), Lula apuntó la cuestión climática como ventaja comparativa de Brasil en la atracción de inversiones, con relación a los demás países, y enfatizó el hecho de que el gobierno brasileño tiene previsibilidad, credibilidad interna y en el mundo, además de garantía de estabilidad social.
"Brasil tiene una matriz energética muy limpia, tiene un potencial eólico muy grande y un potencial de energía solar aún mayor. Brasil está trabajando la cuestión del hidrógeno verde en varios estados del Nordeste, además de nuestra política de biodiesel, de etanol y de la biomasa, que son alternativas que el país tiene para ofrecerle al mundo como colaboración", enumeró el presidente.
Para reforzar el potencial de atracción de inversiones de Brasil, él también destacó que el país tiene estabilidad jurídica, estabilidad política y se transformará en un país de estabilidad económica. Lula hizo referencia al paquete de obras de infraestructura que está siendo negociado con gobernadores como posible cartera para recibir capital internacional.
Brasil tiene una matriz energética muy limpia, tiene un potencial eólico muy grande y un potencial de energía solar aún mayor. Brasil está trabajando la cuestión del hidrógeno verde en varios estados del Nordeste, además de nuestra política de biodiesel, de etanol y de la biomasa, que son alternativas que el país tiene para ofrecerle al mundo como colaboración
Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de la República
Al lado del gobernador de Bahía, Jerónimo Rodrigues – que firmó un memorando de entendimiento para la producción de combustibles renovables en la Refinería de Mataripe, localizada en el municipio de São Francisco do Conde (BA) – el presidente citó como ejemplo de potencial para la atracción de dinero externo la construcción de un puente de 12 km que conecta Salvador a Itaparica, que "favorecerá el desarrollo de Brasil".
GOBERNANZA MUNDIAL MÁS FUERTE – En la conferencia de prensa, el presidente brasileño defendió que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) tenga más representatividad, con inclusión de nuevos actores en el Consejo de Seguridad, para que haya en el mundo una gobernanza nacional mundial más fuerte. Según él, la realidad política de 1945 no es la misma del 2023, y el mundo no puede continuar haciendo en pleno siglo 21 aquello que era hecho en el siglo 20.
"Queremos más países participando. Queremos países de América Latina. Queremos países de África, queremos más países del mundo árabe, queremos a Alemania. Queremos a India. Cuando se tenga más representatividad en esta gobernanza mundial, podemos tomar la decisión sobre la cuestión del clima y será obligada a ser cumplida por todos los países y no será una decisión del estado nacional. Es simple".
Lula defendió también que las mayores economías del mundo, reunidas en el G20, deben poner en su agenda de discusión cuestiones como la inflación, la tasa de intereses, la violencia y otros temas que están en el orden del día de diferentes países.
"La violencia es una cuestión muy grave hoy en varios países del mundo. En Brasil estamos teniendo violencia en las escuelas, en las guarderías. Y debemos discutir en el G20 cómo cuidaremos de esas plataformas digitales, donde no hay ninguna responsabilidad con las fake news, con la transmisión de odio, con verdaderas prácticas terroristas a través de una red digital, que de social tiene muy poco hoy".
De acuerdo con el presidente brasileño, el orden del día es fortalecer la democracia en el mundo, respetar las instituciones democráticas y acabar con la diseminación del odio, las desigualdades y el hambre en el mundo. "Esos temas creo que deben ser discutidos. Sino, no vale la pena. Esa es mi preocupación", destacó.
G20 PARA LA PAZ – En respuesta a preguntas de periodistas, Lula volvió a hablar sobre la necesidad de que las naciones del mundo que no quieren la guerra se unan para intentar restablecer la paz entre Rusia y Ucrania. "Cuando hubo la crisis económica del 2008, rápidamente, creamos el G20 para intentar salvar la economía. Ahora es importante crear otro G20 para acabar con la guerra y establecer la paz. Esa es mi intención y creo que lograremos algo muy grande. Estamos encontrando un conjunto de personas que prefieren hablar de la paz antes que de la guerra, y creo que funcionará", concluyó el presidente.
DECLARACIÓN CONJUNTA EAU-BRASIL (português)