Discurso do embaixador do Brasil no México, Enio Cordeiro, por ocasião da inauguração da exposição "Antropofagia y Modernidad" no Museo Nacional de Arte (MUNAL) – Cidade do México, 16 de junho de 2016 [Espanhol]

Sr. Secretario de Cultura, Don Rafael Tovar y de Teresa,

Sra. María Cristina García Cepeda, Directora del Instituto Nacional de Belas Artes

Estimado Agustín Arteaga, Director del Museo Nacional de Arte

Sra. Victoria Giraudo, Curadora ejecutiva del Museo de Arte Latino Americano de Buenos Aires (MALBA)

Queridas Hecilda y Marta Fadel

Amigos todos,

Antes de todo quiero agradecer al Patronato del Museo y a su Director por haber invitado a la Embajada del Brasil para asociarse a esta importante iniciativa de presentación al público mexicano de una muestra sobre el período más emblemático del arte brasileño.

La muestra reúne obras de pintores y escultores brasileños de una época muy fértil de nuestra cultura que está representada por el Modernismo y las demás tendencias artísticas de la primera mitad del siglo 20.

Valoro muchísimo la oportunidad de estar con ustedes en la esta ceremonia de inauguración de la exposición "Antropofagia y Modernidad".

Quiero recalcar que esta muestra ha sido posible gracias a la generosidad de la Colección Fadel, que reúne el acervo pictórico más importante de todo el período modernista en Brasil.

Asimismo esta muestra se debe a la generosidad y al aporte que hace el Museo de Arte Latino Americano, el MALBA, de Buenos Aires, que es - en todo el mundo - uno de los mayores repositorios del arte moderno y contemporáneo de Brasil.

Es así un hecho bastante emblemático - y nos llena de alegría - que instituciones de tres países - México, Argentina y Brasil - aúnen esfuerzos en esta ocasión para juntos introducir el Modernismo brasileño al público mexicano. Como ex - Embajador de Brasil en Buenos Aires y actual Embajador en México, no podría dejar de señalar el fuerte simbolismo que trasciende en esta ocasión.

Más allá de la natural simpatía recíproca entre mexicanos y brasileños, de la atracción que sentimos por la historia y las tradiciones de cada uno, la verdad es que todavía persisten prejuicios en nuestra relación y un enorme déficit de conocimiento recíproco. Por eso necesitamos tanto conocernos cada vez más y mejor.

De hecho lo estamos haciendo a través de un fuerte aumento del turismo entre los dos países. El promedio anual de visitantes brasileños a México en los últimos años sobrepasa a 300 mil y el de visitantes mexicanos a Brasil es de 100 mil personas. Y lo estamos haciendo también con esfuerzos de un mayor y más intenso intercambio cultural, que es el puente más fértil y seguro para romper los prejuicios, para acercar a los pueblos que multiplicar las oportunidades de integración.

México y Brasil deben verse cada vez más trabajando juntos en iniciativas comunes, especialmente en el campo económico, político y cultural. Es muy importante también que desde afuera otros nos vean trabajando juntos, compartiendo nuestras inquietudes, nuestro destino y nuestra cultura.

Conocernos más y mejor y aproximar a nuestros pueblos a través de la cultura es un factor que genera mayor confianza en la integración latinoamericana y que asegura para todos nosotros un mayor grado de equilibrio en nuestras relaciones con todo el mundo.

México es el primer país en recibir esta colección del Modernismo brasileño, en la cual se puede apreciar el ingenio y la creatividad de grandes artistas plásticos como fueron Anita Malfatti, Di Cavalcanti, Tarsila do Amaral, Cícero Dias y Candido Portinari, entre otros. Esta muestra permite reconocer a través del arte las impresionantes similitudes que marcan la historia de nuestros dos países.

El modernismo en Brasil, al igual que en México, fue parte de un largo proceso de búsqueda de la identidad nacional. Eso está visible, por supuesto, en la grande obra de los muralistas mexicanos. Al igual, esta es la directriz fundamental del modernismo brasileño. Octavio Paz habla de la búsqueda de una identidad nacional propia ante "la infinita riqueza del mundo". Así también hablan los modernistas brasileños.

Su arte buscó desvelar el carácter nacional de "brasilidad" frente a esa infinita riqueza del mundo. Oswald de Andrade decía que la "brasilidad" resultó de un proceso antropofágico de asimilación de las diversas tradiciones culturales que enmarcaron la formación de Brasil.

Apreciar esta muestra "Antropofagia y Modernidad" es penetrar en el ámago profundo del alma brasileño. Estoy seguro de que la disfrutarán. Agradezco una vez más la iniciativa del Patronato del Museo Nacional de Arte y la entusiasta participación del Malba y de la Coleccion Fadel.

Muchas gracias