Negociaciones sobre Subvenciones a la Pesca
En la Conferencia Ministerial de Doha de la OMC, de 2001, se decidió iniciar negociaciones para aclarar y perfeccionar las disciplinas sobre las subvenciones a la pesca. El mandato de negociación se elaboró en la reunión Ministerial de Hong Kong, en 2005, con miras a prohibir algunas formas de subvenciones a la pesca que contribuyen al exceso de capacidad y a la sobrepesca.
La actividad negociadora recibió un nuevo impulso en 2015, en el contexto de la adopción de las metas de desarrollo sostenible. En la reunión Ministerial de Buenos Aires, en 2017, se acordó un plan de trabajo para alcanzar, hasta la Conferencia siguiente, un acuerdo sobre disciplinas que prohíban algunos tipos de subvenciones que contribuyen a la sobrecapacidad y a la sobrepesca y eliminen los subsidios que contribuyen a la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada.
Estado actual de las negociaciones
Las discusiones tienen lugar en el Grupo Negociador de Normas y cuentan con la participación de todos los miembros de la OMC. Las tratativas se estructuran en cuatro ejes: i) eliminación de las subvenciones a la pesca ilegal, no declarada y no reglamentada; ii) prohibición de las subvenciones a la pesca de poblaciones sobreexplotadas; iii) prohibición de subvenciones que contribuyan a la sobrepesca y a la sobrecapacidad; y iv) temas transversales, como transparencia y trato especial y diferenciado.
El tema es complejo, involucrando aspectos comerciales y de sustentabilidad. Existe una gran disparidad entre los miembros de la OMC con respecto al monto de las subvenciones otorgadas para la pesca marítima. Además, según los análisis de la FAO, el 80% de las poblaciones marinas están sobreexplotadas o en situación de máxima pesca sostenible, lo que puede comprometer la actividad y la seguridad alimentaria de las poblaciones a largo plazo.
Actuación brasileña
Brasil participa activamente en las negociaciones. Patrocina, con otros países, una propuesta sobre el procedimiento de consultas entre los miembros de la OMC para aclarar dudas sobre la implementación de las disciplinas a acordar. Además, Brasil es proponente de un mecanismo para reducir y limitar el monto de las subvenciones, manteniendo un margen para el apoyo sostenible hasta un cierto nivel por parte de los miembros que poco o nada subvencionan.
Brasil evalúa que es necesario reducir el monto global de las subvenciones a la pesca marítima, sobre todo por parte de los países que más desembolsan recursos al sector, con el fin de reducir el grado de disparidad entre mayores y menores otorgantes de subvenciones y asegurar una mayor sostenibilidad de la captura marítima.