Ataques israelíes a la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas en el Líbano (UNIFIL)

Brasil condena los ataques perpetrados por las fuerzas armadas de Israel contra puestos de la misión de paz de las Naciones Unidas en el Líbano (UNIFIL). Los ataques ocurrieron en las localidades de Naqoura, Labbouneh y Ras Naqoura y causaron heridas a dos cascos azules de nacionalidad indonesia, además de causar daños a la infraestructura de la misión.

UNIFIL cuenta con más de 10.000 militares provenientes de 50 estados miembros de la ONU, incluidos once militares brasileños.

El gobierno brasileño recuerda la obligación de todas las partes en el conflicto de garantizar la seguridad y la protección del personal e instalaciones de la ONU, así como respetar la inviolabilidad de dichas instalaciones en todo momento. Cualquier ataque deliberado contra las instalaciones de UNIFIL o contra los cascos azules que operan bajo la bandera de la ONU constituye una grave violación del Derecho Internacional, del Derecho Internacional Humanitario y de la Resolución 1701 (2006) del Consejo de Seguridad de la ONU, que estableció los términos del alto el fuego que puso fin a la guerra de 2006.

UNIFIL fue establecida en 1978 por el Consejo de Seguridad para monitorear el cese de hostilidades en la frontera entre Israel y el Líbano; apoyar a las fuerzas armadas libanesas en el sur del Líbano para asegurar que esa área no sea utilizada por grupos armados; ayudar en la implementación de las resoluciones del Consejo de Seguridad; facilitar el regreso de los civiles desplazados y prestar asistencia humanitaria; y apoyar al gobierno del Líbano en la restauración de su autoridad en el área.

El gobierno brasileño reitera su condena a los ataques israelíes contra zonas civiles densamente pobladas en el Líbano y renueva su llamamiento a las partes involucradas para que cesen inmediatamente las hostilidades, con el fin de detener la preocupante escalada de violencia en la región.